Archer y las chicas asintieron a las dos chicas, quienes devolvieron sus saludos con una sonrisa. Se giró hacia sus chicas y comenzó a presentarlas. Hizo un gesto hacia el grupo de jóvenes que estaban a su lado.
—Primero, tenemos a Ella —dijo Archer con calidez—. Ella.
—Luego, Teuila —continuó, asintiendo a la chica con pelo azul vibrante y un aura de confianza—. Teuila hizo un gesto de reconocimiento.
—Sera —dijo Archer, señalando a la chica con un aire misterioso—. Con su pelo rojo sangre atado en una cola de caballo, Sera ofreció una pequeña sonrisa.
—Y permítanme presentar a Nefertiti —anunció, cambiando su atención hacia la chica que exudaba un aire de compostura regia y elegancia—. Como respuesta, Nefertiti asintió graciosamente.
Archer entonces presentó a Hemera, la chica con una sonrisa radiante y una afinidad por la magia del sol. Hemera saludó a los espectadores con un cálido gesto con la mano.
—Talila —dijo él, apuntando a la elfa que asintió a cambio.