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Capítulo 25 – ¡La tienda general del hombre de Florida lanza una promoción: el precio aumenta en un 500%!
Leo explicó su esquema de negocio a Wu Buyi.
—No lo harás gratis. Te pagaré comisiones. Por ejemplo, si un cliente invitado gasta 100 Años de Vida en mi tienda, te daré un artículo valorado en 10 Años de Vida como recompensa de comisión. Fácil, ¿verdad?
Wu Buyi estaba estupefacto. Nunca había oído hablar de este esquema de negocio antes. A pesar de haber comerciado con innumerables comerciantes y compañeros cultivadores, nunca había oído hablar del sistema de [Comisión de Venta].
Emocionado, Wu Buyi recitó en voz alta lo que había aprendido —¡E-Entonces, si te presento a un cliente, y esa persona gasta 500 años de esperanza de vida aquí, yo obtengo 50 años como puntos para intercambiarlos por artículos en la tienda? ¿Es correcto?
—¡Por supuesto!
—¡ESTOY DENTRO! ¡CUENTA CONMIGO!
Wu Buyi aceptó de inmediato. Después de todo, no tenía nada que perder. Además, conocía a cientos de alquimistas y expertos en la alianza Jianghu y Wu Buyi estaba seguro de que esos viejos inmortales gastarían la mayoría de su esperanza de vida en hierbas y frutas preciosas de Leo.
El alquimista salivaba, imaginando lo que podría obtener gratis. Sin embargo, estaba lo suficientemente sobrio para darse cuenta de un problema: no había una moneda o medio para llevar la cuenta de las recompensas por comisión de Wu Buyi.
Con algunas dudas, Wu Buyi preguntó a Leo —Pero, compañero daoísta, ¿cómo calculamos mis recompensas? ¿Tengo que reclamarlas inmediatamente? ¿Podemos hacer algo como los puntos de contribución de mi secta para que pueda canjear mis puntos por el material de recompensa más tarde?
Leo lo esperaba. Revisó el sistema de la tienda para ver si podía otorgar esperanza de vida a otros.
La respuesta fue no: no podía dar directamente su esperanza de vida a otras personas.
Sin embargo, había una forma conveniente. Mientras Leo examinaba el menú del sistema, notó una característica bloqueada.
[Desbloquear función de empleado de tienda] – 100 Años de Vida.
Costaba 100 años desbloquearla, algo que no era un problema para Leo ya que había comido tantos bistecs de lobo y Hierba durante la semana.
DING
Leo lo desbloqueó. Luego, trató de operar el sistema. Presionó en una nueva pestaña al lado del menú de construcción del dominio de la tienda.
Apareció una nueva ventana. Una plantilla de currículum se mostró en la pantalla. En el retrato en blanco, había un icono de [+].
Leo presionó en él. Luego, el sistema preguntó.
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—Por favor, elija al trabajador que desea emplear. El trabajador debe estar dentro del dominio de su tienda. —dijo el sistema.
—¿Oh? —Leo inmediatamente presionó el ícono de [+]. Luego, apareció una lista con las personas en el dominio. Como Wu Buyi era el único presente, solo había un nombre para elegir.
Después de agregar a Wu Buyi al menú, se mostró su información general. La parte interesante estaba en el fondo de la pantalla.
—Configuraciones de Salario y Sueldo —leyó en voz alta—. Por favor, elija el método de pago para el empleado. —Había cuatro opciones: Salario mensual, Salario anual, Basado en comisión y Basado en contrato. Además, Leo podría ajustar el salario o la tasa de comisión.
Sin embargo, algo hizo sonreír a Leo. Podría pagar a Wu Buyi con esperanza de vida en lugar de monedas de oro u otra moneda nativa. Inmediatamente estableció el método de pago a basado en comisión y puso la tarifa al 10%.
DING
—Wu Buyi ha sido asignado como empleado. —Solo Leo podía ver el mensaje. Wu Buyi todavía no se había percatado de los cambios.
Después de confirmar el método, Leo confirmó su trato.
—Nos conformaremos con una comisión del 10%. Además, deberías saber acerca del precio de mis artículos. —Tan pronto como Leo mencionó la etiqueta de precio, Wu Buyi inmediatamente ofreció su consejo—. Señor, sobre el precio de los artículos, ¿puedo ofrecer mi sugerencia? Verás, creo que los subestimas.
—¿Hmm?
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= Por la noche =
Wu Buyi regresó a la secta con una expresión vacía. Su mente aún recordaba el trato que había hecho con Leo mientras miraba el ojo viviente en su mano. No podía dejar de sonreír.
Podía decir que era un parásito, viendo cómo secretamente consumía piel muerta de su palma como alimento. También miraba un plátano en su mano izquierda, que había obtenido de Leo como pago adelantado por la publicidad.
—En lugar de arriesgar nuestras vidas en reinos místicos, podemos obtener píldoras baratas e ingredientes de alquimia de su tienda. ¡Esta idea es… increíble e innovadora! —exclamó Wu Buyi.
Wu Buyi estaba emocionado. Corrió a su casa para conseguir un contenedor para la Banana de Arena Dorada y el ojo. Luego, voló a la morada de un amigo —la pagoda del gran anciano Han Hao.
Tan pronto como entró en la habitación de Han Hao, le mostró al gran anciano el plátano y el ojo protésico.
—Han Hao. ¿Ves esto? —Wu Buyi señaló el plátano—. ¿Adivina de dónde lo saqué?
Han Hao abrió lentamente los ojos. Había estado meditando y esperando el informe de Wu Buyi sobre Leo durante días. Pero en lugar de informar, Wu Buyi parecía extrañamente entusiasmado.
—¿Es eso una fruta del elemento tierra? ¿De dónde la conseguiste? El reino místico aún no se ha abierto. —Han Hao frunció el ceño y observó el ojo saltarín en una botella.
—Del lugar de siempre, la tienda del Daoísta Hombre de Florida.
—¡Te pedimos que investigaras a la persona, no que comprases! ¡Pero qué demonios, Buyi!
Cuando hablaron hace unos días, acordaron que Wu Buyi visitaría al misterioso cultivador para investigar su motivo. Sin embargo, este tipo voló por tantas ciudades durante esos días, lo que decepcionó a Han Hao.
Wu Buyi lucía orgulloso. Se rió:
—¿Sabes qué? Ahora voy a trabajar a tiempo parcial para la tienda del Daoísta Hombre de Florida. Enviaré a todos los alquimistas disponibles a visitar su tienda y comprar sus raras hierbas. Diles a los demás que no iré al reino místico esta temporada.
—¿¡QUÉ?! ¿¡PERO POR QUÉ!? —Han Hao se quedó impresionado.
—¿No puedes adivinar qué es lo que está en la botella, Han Hao?
...
Han Hao suspiró profundamente y observó el ojo viviente. Aunque no era alquimista, podía identificarlo.
—Órgano protésico. Sí, esto es un valioso tesoro. Si lo vendes, te harás rico. Entonces, ¿por qué me lo muestras? Sé que eres rico. ¿Cuál es el punto?
Wu Buyi caminaba de un lado a otro por la habitación. Continuaba murmurando. A simple vista, parecía inquieto. En realidad, estaba ebrio de dopamina y serotonina.
—Tenemos un nuevo proyecto, Han Hao. Daoísta Hombre de Florida planea abastecernos con raras frutas elementales y hierbas. ¡De hecho, si tenemos suficiente abastecimiento, es posible que ya no necesitemos depender de los reinos místicos! —la expresión de Han Hao se tornó fea, confundida.
—¿Hah?
Como Wu Buyi estaba demasiado emocionado, no explicó correctamente lo que vio o hizo. Wu Buyi también se dio cuenta de que olvidó informar todo en detalle, comenzó dando palmadas a la botella del ojo.
—¡Ejem! Lo siento, me emocioné demasiado —Wu Buyi tomó varias respiraciones profundas—. ¿Qué tal si te digo que Daoísta Hombre de Florida tiene alrededor de 20 ojos como este?
—¡¿QUÉ?!
Han Hao contó sus dedos. Uno de ellos era suficiente para obtener un millón de piedras espirituales. ¡Con 20, podría volver loca a la Alianza Jianghu o incluso desencadenar una guerra!
—Eso no es todo, amigo —continuó Wu Buyi—. En su tienda, vi miles de hierbas inmortales, cientos de Col Yin y cientos de plátanos del desierto. ¡Y eso no incluye el corazón, hígado, sangre y huesos de Fenrir! ¡Demonios, tiene tantos ingredientes que hizo píldoras de grano inferiores usando hierbas elementales! Todavía me duele el corazón cada vez que lo pienso. Pero hey, una de esas píldoras sigue siendo muy útil para los discípulos, especialmente los que ya han despertado su Qi elemental. Ya no necesitan arriesgar sus vidas para cultivar Qi elemental en los reinos místicos. ¡Podemos simplemente dar las píldoras elementales a los discípulos prometedores en su lugar!
Wu Buyi habló tan rápido que se trabó.
Mientras tanto, Han Hao logró juntar las piezas del rompecabezas y entendió la idea general. De inmediato encontró la falla de este esquema.
—¿Qué pasa si esa persona de repente se queda sin hierbas raras? ¿Qué hay de la inversión y los precios de esas píldoras? Ningún hombre cuerdo suministraría todo gratis. Entonces, Buyi, ¿cuál es la trampa? —preguntó.
Wu Buyi infló su pecho y sonrió ampliamente. Se rió de Han Hao.
—Eres un tonto. Daoísta Hombre de Florida es alguien de un reino superior. Vi su anillo espacial. No se parece a nada de lo que nosotros llevamos. Debe haber algunas hierbas o tesoros que aún no nos ha mostrado. Además, ¡no necesita piedras espirituales ni monedas de oro! ¡Solo necesita nuestra esperanza de vida!
—¿Esperanza de vida? Ah, cierto —Han Hao entrecerró los ojos—. Había oído hablar de esto por su hijo, Han Meng.
Al principio, Han Hao creyó que Han Meng había sido engañado. Pero después de escuchar el testimonio de Wu Buyi, su interés se avivó.
—¿Cuánto necesita? —preguntó.
Wu Buyi caminó hacia un estante y recogió un papel en blanco. Tomó un pincel y comenzó a escribir.
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Hierba Inmortal – 50 Años por hoja
Plátano de Arena Dorada – 50 Años por Pieza
Col Yin – 50 Años por Cabeza
Píldora de Grano Elemental – 10 Años por píldora
Ojo Protésico de Fenrir – 500 Años por ojo
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Wu Buyi sonrió. Él ideó estos precios para hacer la tienda de Leo más rentable. Además, con estas etiquetas de precio, sus ingresos también aumentarían. A pesar de que costarían más para comprar las cosas de Leo, el valor apropiado haría la tienda más atractiva para los viejos expertos.
—¿Qué tal? Barato, ¿verdad? —dijo con una sonrisa.
—… —respondió Han Hao, aún incrédulo.