—No…
—Déjame en paz…
Una mujer apareció en medio del bosque, sus rasgos faciales ocultos por su largo cabello oscuro.
—Estoy aquí —susurró, resonando a través del bosque.
—¡He estado aquí todo el tiempo! He estado insinuando que soy yo.
—Encuéntrame.
—Encuéntrame, June.
Justo entonces, él escuchó lo que parecía ser una risa. Sin embargo, no era maníaca, ni siquiera intimidante. De hecho, sonaba cálida... y familiar.
Sin embargo, justo cuando estaba a punto de deleitarse con la calidez de la risa familiar, la mujer se lanzó hacia él a toda velocidad.
June se despertó sobresaltado, respirando con dificultad mientras miraba alrededor de la pequeña habitación. Colocó su mano sobre su corazón acelerado y se calmó al darse cuenta de que solo había sido una pesadilla.
—¿Qué demonios fue eso? —murmuró.
¿Fue por culpa de esa anciana? ¿Cómo pudo Ramil PD revelar casualmente que había muerto hace tres años?
June sacudió la cabeza. El mundo era extraño, sin duda.
