—Antes de irse a dormir, Safiyya le envió a Alex una foto suya —aunque parte de su rostro estaba recortada. Después de todo, no quería revelar que era la princesa de Omán. Y aunque Alex la había visto la noche anterior, tuvo que admitir que la chica se veía mucho mejor en su ropa cómoda, es decir, una camiseta sin mangas y unos pantalones cortos, que lo que se veía con el vestido apretado y el hiyab que llevaba en la comida.
—Al día siguiente Alex inventó alguna excusa para "volver a la República Checa" asegurando al Príncipe de Omán que sus armas estarían llegando —aunque nunca lo harían—. Mientras tanto, consiguió dos entradas para la convención del juego que jugaba con Safiyya, e incluso había asegurado su medio de transporte. Le envió su itinerario de vuelo, la información del hotel, y los datos de su entrada para el evento.