Jimmy Jones estaba en medio de esnifar cocaína cuando recibió una llamada de su mánager. Sin embargo, eso era algo que realmente no le importaba. El hombre contestó la llamada y continuó aspirando la línea antes de dirigirse al interlocutor.
—¿Sí? ¿Qué pasa? ¿Por qué coño me llamas a estas horas?
El tono del mánager era severo. Aunque no reprendió a su luchador por hacer drogas ilícitas, aunque de ser atrapado podría tener consecuencias graves para su carrera. En cambio, se dirigió rápidamente al hombre, diciéndole por qué estaba llamando
—Escucha, recibí una llamada de un individuo muy poderoso. Digamos que tiene interés en tu pelea con el chaval y quiere hablarte sobre una propuesta. No sé más detalles y depende de tu criterio cómo quieras proceder.
