Después de recibir las noticias del guerrero, Atticus inmediatamente dejó la torre de observación y se dirigió hacia la sala de reuniones. Le dijo a Lírico que se quedara atrás, ya que el muchacho no tenía permiso para unirse al equipo de exploración fuera de la fortaleza en primer lugar.
Lírico había querido rogarle a Atticus que convenciera a su padre de dejarlo unirse, creyendo que el apoyo del ápice podría influir en la decisión de Candence. Pero Atticus rechazó la idea sin vacilación. No tenía intención de llevar a alguien que pudiera ser una responsabilidad. Además, ni siquiera él podría garantizar la seguridad de nadie en un ambiente como este.
Los Vampyros eran una raza notoria por su precisión en el asesinato y tácticas brutales. Atticus no podía permitirse dividir su enfoque durante la batalla. Nunca había luchado preocupándose por otros, y cuando luchaba, lo hacía con todo.
