—Zeras. Su nombre es Zeras, mi señora... —Esta vez fue D'arvey quien respondió, mientras una sonrisa agradecida aparecía en el rostro de Korama. Antes de que la mimada princesa pudiera decir más palabras, rápidamente desapareció dentro de la nave espacial, la cual inmediatamente se alejó a toda velocidad, convirtiéndose en una estrella fugaz.
—Zoom... —D'arvey envió la orden a través de su dispositivo de comunicación, y al instante, ellos también desaparecieron lejos de la multitud y hacia la distancia. Era solo cuestión de tiempo antes de que las multitudes se dispersaran completamente de la escena, pero con tantas familias de más alto nivel involucradas, sin duda se esparciría por el reino: ¡la princesa de 10 años Senna le propuso matrimonio a un alienígena llamado Zeras!