Una existencia hecha completamente de energía dorada. Energía dorada afilada como un cuchillo hacía temblar el espacio en su alrededor repetidamente como si fuera incapaz de mantenerlo en su lugar.
Pero su forma era indescifrable, oculta detrás de la luz dorada.
Lentamente llegó ante Jason, quien lentamente flotaba del suelo para ponerse de pie frente al hombre.
—AHHH... Un pequeño grito agudo escapó de los labios de Jason al ver la entidad dorada, sin embargo, la sangre brotó aún más de su boca.
—Pero, debería estar muerto, ¿cómo has hecho tú? —preguntó Jason en shock.
—Solo te traje de vuelta por unos segundos. Morirás una vez más después de eso excepto que esta vez no habrá vuelta atrás... —dijo la voz, haciendo que Jason sintiera su pelo erizarse.
Podría haber elegido morir hace tiempo, pero cuando nuevamente se enfrentó a la vida, la muerte era extrañamente aterradora.