El truco era bastante simple.
Ater sabía que su Habilidad de [Ilusión] sería inútil aquí, debido a que la zona de influencia no se extendía más allá de la barrera que tenía enfrente. También sabía que una mera conversación probablemente le haría perder el tiempo en lugar de hacer progresos.
Por ello, buscó el método más eficiente para alcanzar sus objetivos.
Ese método era usar a Esme.
Al hacerla la chivo expiatorio, permitiéndole acercarse a la barrera, pudo despertar cierto interés en el Hada—especialmente desde que esta ya tenía cierto aprecio por Esme, al haber sido tocada por El Oráculo.
Esme naturalmente se desmayó una vez que alcanzó cierta proximidad a la barrera, pero Ater la controlaba usando la Habilidad de [Marioneta] que aprendió de Justin, así que hizo parecer que ella seguía caminando hacia adelante.
Esto, por supuesto, hizo que el Hada reaccionase impulsivamente.
