—Esperanza abrazó la versión más joven de Kace durante vaya Dios a saber cuánto tiempo... ni siquiera sabía con certeza cuánto tiempo habían estado en esa posición, ya que perdió la noción del tiempo y no sabía qué más podría hacer para aliviar la tristeza que él sentía.
—Kace ni siquiera la dejó ir cuando Esperanza quiso liberarse, él la abrazó aún más fuerte, como si tuviera miedo de que su compañera desapareciera y no tuviera ninguna oportunidad de verla de nuevo.
—Kace no me perderás —finalmente dijo Esperanza—. No podía seguir así por más tiempo. No sabía qué estaba pasando en el mundo real, el otro Kace debe estar asustado a estas alturas si ella no despertaba pronto. Le conocía demasiado bien para suponer eso—. Todavía estoy aquí y no me iré a ningún lado...
—Pero, morirás —lamentó Kace—. No quiero que mueras. Te necesito.
—No quiero morir tampoco —respondió Esperanza—. Pero, no podemos dejar que esas personas mueran para mantenerme viva. No puedo vivir así.