—¿A dónde debería ir? —preguntó Alicia.
—Eso depende de dónde quieras terminar —respondió el Gato de Cheshire.
—Alicia en el País de las Maravillas.
**************
—¿Qué es el desierto del que no se regresa? —preguntó Raine mientras caminaba hacia el niño.
—¿Eh? —El niño inclinó la cabeza, mientras fruncía el ceño—. ¿No conoces el desierto del que no se regresa?
Raine negó con la cabeza sinceramente, nunca había oído algo así, ni sabía que existiera un lugar con un nombre similar.
—Extraño —comentó el niño—. Todo el mundo de este pueblo sabe sobre el desierto del que no se regresa. Ese es un lugar prohibido —su voz bajó hasta convertirse en un susurro.
—Si ese lugar es prohibido, ¿qué hacía allí tu hermano? —Raine se agachó al lado de la mesa hasta que ambos pudieron verse a los ojos.
—Mi hermano es un hombre fuerte. Es el más fuerte de todos los ángeles guardianes —el pequeño hablaba de su hermano con una voz que se entrelazaba de orgullo.