—Felicitaciones, el bebé parece muy saludable —dijo Eaton casualmente a Lana cuando ella se paró a su lado, con sus ojos en el estómago de Lana.
Sin embargo, su comentario casual hizo que las conversaciones a su alrededor se extinguieran y los tres ángeles guardianes, junto con Calleb, giraron sus cabezas hacia ellos.
—¿Bebé?
—¿A qué te refieres con bebé?
Sus preguntas resonaron dentro de la habitación y gradualmente su enfoque se trasladó a Lana.
—¿Estás embarazada? —preguntó Calleb a Lana, se acercó a ella y comenzó a olfatearla antes de que Rafael lo apartara.
—¿Qué estás haciendo olfateando a mi compañera como te plazca? —preguntó Rafael gruñendo, empujó a Calleb y atrajo a Lana hacia él.
Calleb ignoró la hostilidad en la voz de Rafael hacia él mientras sus ojos se abrían sorprendidos.
—¿Qué pasa? —preguntó Raine de inmediato, acercándose a Lana con Esperanza a su lado.