```
Anoche, cuando Feng Yi Lan le había contado que su hermano la había enviado deliberadamente al extranjero, solamente empezó a sospechar un poco sobre ello. Nunca en su realidad, pensó que sus sospechas se harían realidad al día siguiente. Y lo que encuentra más extraño es que el Señor Belcebú no mostraba ninguna vacilación en aceptarlo.
—¿Estás… estás diciendo que lo sabías? —preguntó, sin saber qué más debía decir. Había pensado que él negaría sus palabras y entonces ella presentaría sus hechos y descubrimientos frente a él. Pero él lo estaba aceptando todo con tan solo tres palabras, 'lo sabía'.
Feng Shufen la miró y asintió con la cabeza a sus palabras, otra vez —Sí, Señorita Li Xue, dije que lo sabía desde el principio, que tú eras la mejor amiga de mi hermana. ¿Es eso lo único que querías preguntarme? Si es así, entonces genial, porque también tengo cosas que preguntar.
¡Cosas que preguntarle a ella! Por supuesto, ella sabía qué cosas tendría él que preguntar.