—Jin Liwei le lanzó una mirada de reojo a su niña pequeña después de escuchar cómo lo despotricaba —tenía su expresión predeterminada que era fría e indiferente.
Al ver su expresión, los reporteros chinos pensaron que estaba enfadado por lo que Iris había dicho. Parecían asustados y miraban a Iris como si se hubiera vuelto loca. ¡Qué osadía! Ella en realidad dijo que quería golpear en la cara al CEO Jin Liwei. En sus mentes, Iris era como un lindo pero estúpidamente valiente gatito sacando sus pequeñas garras contra Jin Liwei, quien era un gran y poderoso león.
Solo Iris vio el entretenimiento en los ojos de Jin Liwei. Solo las personas cercanas a él podían notar las mínimas diferencias en su acostumbrada expresión fría e indiferente. Para los demás, siempre se veía intimidante.
Al ver que estaba divertido, Iris se rió, asustando a los reporteros.