—Jin Liwei ya estaba excitado cuando Iris se unió a él en la ducha después de quitarse la ropa y el maquillaje. Él la alcanzó pero ella apartó sus manos de un manotazo.
—Compórtate. Necesito lavarte y frotarte bien para asegurarme de que estás limpio. No me distraigas —le dijo ella con voz severa.
—Hmm… Está bien —murmuró él mientras admiraba su hermoso cuerpo desnudo.
Sus ojos se demoraron en sus pechos llenos y bien formados. Se lamió los labios lentamente. Sus manos tenían ganas de sostener sus suaves montículos y de succionarlos con su boca, pero se controlaba... por ahora.
La anticipación burbujeaba dentro de él, mientras abría la ducha. El agua caliente comenzó a caer, mojándolos a ambos de inmediato. Su frustración y dolor anteriores estaban siendo arrastrados por el desagüe. Este juego que ella estaba iniciando lo estaba excitando. No podía esperar a ser "limpiado a fondo" por su niña pequeña.