—¡Buenos días, Papá! ¡Ketchup te extrañó mucho! Miau —Ketchup saludó a Jin Liwei en cuanto sonó su alarma la mañana siguiente. La IA gato ya no sonaba soñolienta y aturdida como la noche pasada. Volvió a ser su yo habitual, alegre y vivaz después de "dormir" y completar sus actualizaciones.
—Buenos días, Ketchup —dijo Jin Liwei sonriendo, contento de que su tercer gato estuviera de vuelta—. No tan alto. Tu mamá aún está durmiendo.
—Oh. Está bien, Papá. Ketchup será silenciosa. Miau —susurró ella.
Más tarde, Jin Liwei terminó de ducharse y vestirse con su traje de negocios antes de dirigirse a la cocina para desayunar. Ice Cream y Popcorn lo acompañaron, y por supuesto, Ketchup también. La IA gato parlanchina habló sin parar sobre diferentes temas pero ni una sola vez mencionó el incidente de la bomba o el lío de hacking que había causado. Su niña pequeña debió haber hecho algo para impedir que Ketchup tocara esos temas.
—Mamá viene, Papá. Miau —avisó Ketchup.
