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Algunos de los subordinados de Jin Liwei y Lu Zihao estaban junto a la puerta y en otros puntos estratégicos de la oficina de la biblioteca. Permanecían como estatuas en sus posiciones y se aseguraban de que nadie molestara a sus empleadores.
Dom y Clover no estaban en la oficina de la biblioteca. Los hermanos acompañaban al Pequeño Jun en la habitación de Clover. El pobre niño ya estaba dormido. Sin embargo, era un sueño muy inquieto. Gotas de lágrimas escapaban de la esquina de sus ojos cerrados. También sollozaba de vez en cuando.
En cuanto a Wei Lan, Iris no le permitió unirse a ellos en la oficina de la biblioteca. Iris se sentía molesta por sus constantes quejas y regaños a Jiang Ying Yue. A Wei Lan no le importaba porque encontró audiencia para sus desahogos entre las jóvenes empleadas del servicio.
