—¡Nuevo libro protagonizado por un bebé! ¡Lee "¡Siempre me convierto en un bebé!" ¡Ahora mismo!
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Lo que Ainsley quería... era solo tomar prestada la habilidad de sanador de almas.
Pero como el espíritu mayor no estaba, Ainsley empezó a preguntar a los demás espíritus también.
—¿Eres tú un sanador de almas?
—Eh, no lo soy.
—¿Eres tú–
—Lo siento, no lo soy. Un sanador de almas es una habilidad súper rara.
—¿Eres tú un sanado–
—Creo que ninguno de los espíritus aquí es un sanador de almas. Pero puede haber otros espíritus fuera del mausoleo con esa habilidad.
Un espíritu bastante poderoso en la sala le dijo amablemente a Ainsley para que no perdiera su tiempo preguntando a todos los espíritus aquí.
Este poderoso espíritu había estado dentro del mausoleo disfrutando de la energía espiritual durante mucho tiempo... quizás alrededor de una década.