¡Cellino estaba atrapado!
En el momento en que el último círculo mágico de la formación se iluminó sobre la cabeza de Cellino, la bestia sagrada instantáneamente sintió como si alguien hubiera congelado todo su cuerpo.
Su cuerpo se endureció comenzando por la punta de sus patas, hasta sus piernas, su cola, su cuerpo superior y finalmente su cabeza.
Era como si el tiempo se detuviera por un momento, y él estuviera adentro, sellado para siempre.
¡Él... ni siquiera podía levantar una pata o mover la cola!
Cellino subconscientemente se estremeció.
—¡AWOOOO! Maestro, estoy atrapado en una formación! ¡No puedo moverme para nada! ¡Y tampoco puedo usar mis habilidades especiales!— Cellino instantáneamente contactó a Ainsley mientras intentaba mover su cuerpo.
¡De ninguna manera estaré atrapado en esta tonta formación. De ninguna manera!
Sin embargo, no importa cuánto lo intentara Cellino, su cuerpo simplemente se quedaba ahí en su pose original, sin moverse para nada.
