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—¿Por qué esta mujer se parece tanto a Zack?
Ainsley acababa de pensar eso cuando la mujer bajó su pierna derecha y la miró con una sonrisa tranquila en su rostro.
—Así que, ¿eres la Niñodios rumoreada, un prodigio del siglo?
Ainsley sintió escalofríos con ese 'título'.
—N-no, yo no soy un prodigio. Pero soy la Niñodios. —Ainsley rió mientras contemplaba secretamente si usar su habilidad de encanto o no.
Después de todo, si el encanto falla, la mujer podría sentirse ofendida de que alguien esté intentando conquistarla.
Sin embargo, como si supiera lo que hay en la mente de Ainsley, la mujer se rió mostrando sus dientes perlados.
—No necesitas usar encanto conmigo. Ya eres linda incluso sin tu habilidad de encanto.
Ainsley estaba tan asustada que casi huye de la habitación.
—¿Cómo lo supo?! ¿Cómo podría saber que estoy a punto de usar encanto? ¿Está leyendo mi mente? ¿O es que soy tan fácil de leer