—Durante los primeros segundos, Alicia quería creer que estaba imaginando cosas —pero la risa de Tyra detrás de ella y la puerta cerrada frente a ella dejaban claro que no estaba imaginando cosas.
—Era real.
—Había sido dejada afuera. Y no era solo ella.
—Miró al guardia a quien había arriesgado su vida para salvar. Había sido ignorado.
—También miró hacia abajo a Paulina, cuyo cuerpo entero temblaba mientras lloraba en el suelo.
—El guardia se alejó del apoyo de Alicia y se apoyó en la puerta. Sin embargo, miró a Alicia con culpa. Como si fuera su culpa que ella no pudiera llegar a tiempo.
—¿Fueron... te empujaron afuera? —Alicia le preguntó a Paulina justo cuando la ayudaba a levantarse, ignorando las burlas de Tyra y su risa loca.
—N-No —tartamudeó Paulina.
—¿Tú... saliste por ti misma? —preguntó Alicia incrédula.
—Todavía se sentía como un sueño para ella.
—Un minuto estaba en el calabozo, liberando a sus hijos. ¿Y al siguiente, estaba siendo dejada afuera?