—Cuando esté lista para tomar un descanso, te lo haré saber —Jia Li respondió y continuó comiendo su almuerzo mientras Fu Hua le ponía comida en su plato hasta que quedó satisfecha.
Cuando estuvo lista para irse, Fu Hua se aseguró de robarle un beso largo, que casi le quitó el aliento.
Después de besarla, le dio una última lamida a sus labios húmedos con su lengua fresca antes de dejarla ir.
—¿Tu intención era hacerme inflar los labios? —Jia Li preguntó mientras usaba su teléfono como espejo para echar un vistazo a sus labios.
—No realmente, solo quería tener un buen sabor tuyo, ya que no hay tiempo para hacerlo de la otra manera —Fu Hua dijo con una sonrisa burlona.
Jia Li lo miró significativamente y preguntó:
—¿Y a qué te refieres con la otra manera?
—¿Qué crees que quiero decir? —Fu Hua preguntó mientras tomaba su mano en la suya.
Jia Li observó su larga mesa de oficina antes de mirar hacia otro lado.
