—Tienes el descaro de atacarme directamente —dijo Lucas, ahora de pie frente a un letal Damien, con una sonrisa burlona que irritaba a Damien.
Damien quería romperle el cuello en dos en este mismo momento, y lo haría.
—Esta lucha siempre ha sido entre tú y yo, terminémosla hoy —Damien habló, y Lucas no esperó a que terminase para transformarse en su forma de lobo.
Un gran lobo marrón apareció frente a Damien y gruñó, demostrando dominio.
Damien también se transformó en un lobo blanco mucho más grande que el de Lucas, y pronto comenzaron a luchar. La pelea duró treinta minutos, y Lucas parecía exhausto, lo que no sorprendió a los espectadores.
Sus hombres ya habían sido derrotados y habían aceptado su destino. En sus próximas vidas, se prometieron servir a un Alfa mejor, similar a Damien.
—Mátame a mí en su lugar y perdona su vida —Damien, que ya se había transformado a su forma humana, se acercó a Lucas, solo para ser detenido por Pedro.