—¿Es este su abuelo? —se preguntó Damien, observando la apariencia del hombre que estaba detrás de él.
—Eso es lo que es único de nuestra noble familia. Tu abuelo y yo tenemos cabello plateado. Tu abuelo también tiene ojos azules como los míos, y Damien tiene hermosos ojos rojos. Los obtuviste de tu padre —mientras las palabras de su madre resonaban en su cabeza, Damien levantó la vista hacia el hombre vestido muy parecido a la ropa que había visto en su padre.
—Tu abuelo y yo tenemos cabello plateado… —los ojos de Damien se dirigieron al cabello plateado que era igual al suyo y al de su madre.
—Tu abuelo también tiene ojos azules como los míos… —cambió su mirada hacia los ojos azules que su madre le había mencionado. Sin embargo, a diferencia de los ojos de su madre, los ojos del hombre eran un poco más oscuros.