Mientras Jiang Yuyan estaba acostada de lado con sus manos atadas frente a su pecho y sus piernas atadas y dobladas por las rodillas haciéndola parecer un bebé, Lu Qiang comenzó a besar la parte trasera de su cuello apartando su cabello hacia un lado.
—Tu espalda desnuda es lo más atractivo en ti, me dan ganas de mantenerte así siempre y continuar jugando con ella —diciendo esto, recorrió con sus dedos su columna vertebral haciendo que ella cerrara los ojos.
Ya estaba cansada por el clímax anterior, pero sus suaves acciones y sus palabras empezaron a calentar su cuerpo de nuevo. Jalándola más cerca, sin dejar espacio entre sus cuerpos desnudos, Lu Qiang levantó la cabeza para besarla de lado mientras con una mano se movía entre sus muslos estrechamente cerrados para hacerla humedecer de nuevo jugando con su botoncito.