Después de la llamada con su abuelo, unos cuantos médicos más entraron a examinarla. Las enfermeras le dieron varias medicinas para tomar, cambiaron su suero intravenoso e incluso ofrecieron ayudarla a ducharse. Zhao Lifei negó profusamente lo último, entonces, le explicaron pacientemente cómo cuidar su herida al lavarse. Como todavía tenía vendajes en la frente y en el estómago, no podría darse una ducha adecuada.
No tuvo más opción que aceptar ayuda para lavarse el cabello. Una vez hecho esto, se quedó sola para limpiar el resto de su cuerpo. Limpió meticulosamente su cuerpo con una toalla y talló su piel hasta que quedara chirriante de limpia. Aun así, no pudo evitar disgustarle el olor del jabón del hospital. Claro, era de mayor calidad ya que esta era la habitación VVIP, pero ella prefería sus geles de baño de aroma floral.
Cuando finalmente salió del baño y se cambió a una nueva bata de hospital, ya estaba oscuro afuera y podía ver las luces centelleantes de la ciudad.