```—Después de tantos años de búsqueda, Calipso finalmente encontró a una persona con el don de la clarividencia para ver el pasado —tarareó Bartos positivamente—. Esta es sin duda una buena noticia. No puedo esperar para aplastar a Nasser con esta información.
—¿Te duelen los labios? —comentó con el ceño fruncido, notando cómo Gedeón se tocaba los labios—. Acariciándolos, para ser exactos. Nada parecía sacarlo de eso, al parecer. Incluso tuve que darle a su amigo una palmada en el hombro solo para llamar su atención.
—¿Qué te pasa? —preguntó.
—¿Eh? —murmuró Gedeón mientras se volvía hacia Bartos—.```
Este último negó con la cabeza—.Estás en las nubes, Gedeón.
—Ah, eso… No es nada —murmuró Gedeón, sus labios formando una sonrisa pícara como si supiera algo que solo él sabía—. Por cierto, ¿te quedarás aquí por un buen tiempo? —Él era quien preparaba la cena, así que quería saber si Bartos volvería a su mansión con su esposa antes de la cena.