Calhoun dio un paso hacia ella, mirando en sus ojos marrones —Quiero mostrarte algo. Lo entenderás. Te lo prometo.
Luego continuaron caminando hasta llegar al lago que le resultaba familiar a Madeline como si hubiera estado allí antes. Pero, al mismo tiempo, pensaba que nunca había visitado este pueblo ni nada cercano a él.
Calhoun soltó su mano y empezó a caminar hacia el borde del lago. Agachándose, comenzó a remover la nieve del suelo, y ella se preguntaba qué quería mostrarle.
Madeline se acercó a él, y vio a Calhoun continuar cavando su mano en la nieve hasta que finalmente sacó lodo. Le pareció muy extraño su comportamiento —¿Qué estás buscando? —le preguntó.
Calhoun entonces finalmente sacó cenizas negras del suelo antes de dejarlas volar con el viento —¿Sabes qué es esto, Madeline?
—¿Polvo? —respondió ella, incierta.
