—Los dientes de Calhoun mordieron la oreja de Madeline, provocando un dolor agudo que la hizo estremecerse. Como si no hubiera terminado, los dientes se hundieron más y Madeline inclinó su espalda hacia Calhoun para que la sostuviera firme.
—¿Por qué harías eso?! —preguntó ella cuando finalmente él soltó su oreja.
—No dejes que tu mente divague cuando estoy aquí contigo —dijo Calhoun—. Necesito toda tu atención en mí.
—Solo estaba pensando por un segundo —Madeline exhaló aire de sus labios.
—¿Sobre el tiempo que escapaste? —vino la rápida pregunta de él.
Ella tragó saliva, al oírlo revelar sus pensamientos. Calhoun estaba tan en sintonía con su entorno y emociones que ella se sentía preocupada. Era como si él supiera todo acerca de ella, desde la punta de su cabello hasta los pies —Relájate —dijo Calhoun sonriendo—. Actúas como si tuvieras planes de huir de aquí y yo justo te descubriera. —Vio pasar una expresión de incomodidad por su rostro.