La torpeza que Eve sentía, dudaba que alguien pudiera comprender cómo se sentía en este momento. Cada paso que daba hacia adelante era rígido, y era porque sabía que él caminaba detrás de ella. El momento no podía ser peor, pensaba en su mente.
—Caminas peor que la abuela que una vez conocí —llegó el comentario desde atrás, y Eve apretó los dientes. Cuando ella aceleró el paso de sus pasos, él dijo:
—Creo que sería mejor si corrieras.
Eve se giró para hablar con él y dijo:
—Señor Moriarty, creo que me gustaría añadir otro punto en los detalles de mi trabajo.
—Todos los detalles ya han sido completados y firmados. El próximo formulario para ello se abre el próximo año —respondió Vincent, y él no la esperó. En su lugar, continuó caminando hacia la entrada de la mansión—. Sabes que olvidé el incidente de ayer, pero alguien parece tener dificultades para dejarlo ir y tuvo que recordármelo.