—La señora Yu lo negó y dijo:
—No se trata de convertirse en sirvientes, tienes que pagar lo que debes.
¿Devolver lo que debe?
Yu Holea quería reír por alguna razón.
Ella calculó su karma con una sonrisa, pero cuanto más calculaba, más asombrada se quedaba.
Antes, cuando calculaba el karma entre la familia Yu y ella, Yu Holea estaba segura de que solo les debía a los hermanos Yu.
Pero ahora después de su cálculo, se dio cuenta de que en efecto debe a la familia Yu.
¿Cómo es esto posible?
Por primera vez, Yu Holea dudaba de sus habilidades.
¿Cómo puede cambiar el karma entre las personas?
¡No! Hay algo sospechoso en este asunto.
Yu Holea finalmente dijo:
—Bien, pero déjame decirte tres cosas. Primero, me quedaré solo un mes y después de eso, ningún miembro de la familia Yu me contactará ni me acosará. Segundo, nadie me insultará, en el momento en que escuche a alguno de ustedes insultarme, me iré y no me importará lo que les deba.