Aún recuerdo este día con bastante claridad, es la mañana después de una noche fría y tormentosa y el amanecer ha llegado con los hermosos rayos del sol y un calor muy necesario.
Esta mañana... presume del amanecer más hermoso que jamás haya presenciado, inigualable incluso hasta hoy. Y por más que lo intento, no puedo olvidarlo...
No puedo olvidar cómo incluso la oscuridad eterna que había tomado control de nuestro mundo pareció detener su avance en este día, como si lo reconociera.
Aún puedo sentir el calor del sol que adorna nuestros cielos en mis mejillas, desterrando todos los escalofríos.
El cielo es inusualmente hermoso en este día... demasiado hermoso, lo detestaba.
Aún puedo escuchar los pasos ansiosos de mi padre, caminando de un lado para otro. No me importa mucho, pero pronto lo haría.
Aún puedo ver oír sus pasos apresurados entrando en la habitación mientras los trabajos de un parto de tres días finalmente liberaban a mi madre.