Neveah salió del Palacio Eclipse hacia el patio con pasos lentos, aún algo insegura de su pisada.
Sabía que Alessio la seguía pero no le importaba su presencia, al principio, le inquietaba mucho darle la espalda
Pero se recordaba a sí misma que esta vez no era tan ingenua como había sido antes, aunque le diera la espalda, sus sentidos siempre estaban en la máxima alerta en su presencia.
Ahora que conocía cómo lucía su fin, no se dejaría caer directamente en él de nuevo, sin importar lo que costase.
Neveah aspiró una profunda bocanada de aire, simplemente mirando hacia el bosque adelante con los brazos cruzados detrás de su espalda.
La Cumbre de Alfas había sido cancelada, un asunto histórico tan importante no podía celebrarse cuando había tal desacuerdo y descontento entre los Alfas Eclipse por resolver.
Barricados en Monte Vernon para ellos mismos, ¿quién sabía qué travesuras planeaban estos Alfas descontentos?