El día estaba a punto de cambiar a la noche. Yu Qi en realidad todavía no quería irse. Quería pasar tiempo con Long Hui.
—Hermano Hui... —Yu Qi llamó a Long Hui.
—Hmm... —Long Hui respondió.
—¿Necesitas regresar esta noche? —la pregunta salió de la boca de Yu Qi. Después de preguntar, su rostro se puso rojo—. No... No necesitas responder a esa pregunta.
No esperaba que su boca actuara más rápido que su cerebro. Realmente solo quería preguntárselo en su mente.
Long Hui se quedó atónito por un momento. Luego sonrió felizmente.
—No necesito regresar esta noche. Puedo quedarme contigo.
Yu Qi sonrió tímidamente.
Regresaron a la ciudad. Entraron a un restaurante para cenar. La comida estaba deliciosa. Y comer con su novio hizo que la comida fuera aún más deliciosa. Después de terminar de cenar, la pareja decidió caminar para digerir la comida.
