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—Sí, la chica parece odiarlo debido a que él coqueteó antes con otras enfermeras —Yu Qi también se rió.
—Bien hecho —Tang Han Lee sabía que a su hermano le gustaba coquetear con las enfermeras—. Entonces, ¿qué quiere que hagas ahora?
—Bueno, primero hablaré con la chica. Luego decidiré qué haré después —dijo Yu Qi.
—Pequeña hermana, vamos a comer juntos hoy —sugirió Tang Han Lee.
—Claro. Pero, ¿tienes que trabajar? —preguntó Yu Qi.
—Volveré a trabajar por la tarde. Si no hay ningún caso de emergencia —Tang Han Lee revisó su horario.
—Por supuesto. También me gustaría —asintió Yu Qi.
—Entonces, pasaré a buscarte más tarde. Llámame después de que termines tu trabajo aquí —Tang Han Lee se fue.
Yu Qi entró al hospital. Fue al mostrador. Las enfermeras en el mostrador parecían conocerla.
—Señorita Tang, un placer tenerla aquí de nuevo —la enfermera recibió a Yu Qi con alegría.
—Gracias. ¿Puedo saber dónde está la enfermera, Su Ke Ke? —Yu Qi declaró su propósito.