—Yu Qi, ¿ya has hecho tu elección? —preguntó la tía Su Xiao.
—Es una buena elección —dijo la Tía Ming Yue después de mirar los tacones que Yu Qi tenía en sus manos.
—También creo que es una buena elección —la Tía Su Xiao también miró los tacones.
—Señorita Tang, ellas son... —Qin Xia preguntó a Yu Qi mientras miraba a la tía Ming Yue y la tía Su Xiao.
—Estas son mis tías, Ming Yue y Su Xiao —Yu Qi las presentó a Qin Xia.
—Tías, este es el presidente Qin. Nos encontramos en Pueblo Shiwa dos veces —Yu Qi les explicó a sus dos tías.
—Hola —la tía Ming Yue hizo una pequeña reverencia.
—Hola —la tía Su Xiao hizo lo mismo que la tía Ming Yue.
—Hola —Qin Xia respondió al saludo.
—Señorita Tang, tengo que irme ahora —dijo Qin Xia a Yu Qi.
—Está bien —Yu Qi lo reconoció simplemente.
—Elige esos tacones. Te quedan muy bien —Qin Xia se fue después de decir esas palabras.