Yu Qi estaba haciendo algunos trabajos dentro de la oficina en el invernadero. Actualmente revisaba el archivo que Su Yu Hi había dejado para ella.
Entonces, alguien tocó a su puerta. La puerta estaba abierta. Yu Qi levantó la mirada y vio a Yi Wen Ding. Yi Wen Ding parecía preocupado.
—Señorita Yu Qi, tenemos un problema en la entrada principal —dijo Yi Wen Ding.
Yu Qi frunció el ceño.
—¿Problema? ¿Cuál es? —preguntó.
—Alguien está causando un alboroto en nuestra entrada principal —dijo Yi Wen Ding—. Ella exigió verte.
—¿Verme a mí? —Yu Qi esbozó una sonrisa fría.
Yi Wen Ding se sorprendió al ver esa sonrisa. No porque fuera hermosa, sino porque era aterradora. Nunca había visto ese tipo de sonrisa en su jefa.
—Vamos a ver a esa persona —Yu Qi se levantó de su silla y caminó hacia la entrada principal.
Yu Qi y Yi Wen Ding llegaron a la entrada principal. Algunos trabajadores observaban la situación.
—Por favor, trabajen —ordenó Yu Qi a sus trabajadores.
