—Hace seis años... no fue un buen año para nadie en esta habitación. ¿Cómo puedo hacer cosas que una persona como yo no debería? ¿Dónde aprendí a luchar? ¿Y cómo sabía sobre Hera Cruel? Sé que tienen más preguntas, pero quizás esto responda a todas sus preguntas.
—Yo soy Hera Cruel.
Un largo silencio, como si se cayera una aguja, reinó inmediatamente en la habitación después del anuncio de Cielo. ¿Fue porque Oso, Tigre, Lobo y Joker estaban cansados que no parecían ver la sinceridad en esa declaración?
—Jaja —Tigre soltó una risa corta y aireada. Se puso las manos en la cintura, riendo mientras apuntaba a Cielo y miraba a Lobo—. Eh, creo que mi cabeza me está jugando una mala pasada. La estoy escuchando decir más tonterías.
—No... —Lobo frunció el ceño y entrecerró los ojos, negando suavemente con la cabeza—. Quiero decir, también estoy cansado. Estoy en la edad en la que tengo que apegarme a mi horario de sueño, pero lo arruiné desde que entré aquí.
