Como una de las inversoras en la película Tiempo tras Tiempo, Adrienne fue invitada a asistir a la fiesta de lanzamiento junto con su suegra. Llegó con Abigail, vestida con un elegante vestido negro adornado con diamantes brillantes.
Las dos mujeres acapararon las miradas al entrar en el lugar, irradiando confianza y gracia. Detrás de ellas estaban sus guardaespaldas, asegurándose de que nadie se atreviera a acercarse demasiado. El director de la película dio la bienvenida a Adrienne y Abigail y les agradeció su apoyo mientras elogiaba su impecable sentido del estilo.
Los flashes de las cámaras se dispararon mientras los fotógrafos capturaban su glamurosa entrada, ansiosos por tomar sus fotografías. Adrienne y Abigail se abrieron paso a través de la multitud, aceptando cortésmente los cumplidos antes de unirse al resto del elenco y equipo de la película.