—Gracias por el... —Elliana se detuvo en su frase cuando vio a Aditya entrar en la cantina, luciendo tan apuesto como siempre, y entrecerró los ojos.
—Me reuniré con ustedes más tarde. Tengo que hablar con él —Elliana se apresuró sin esperar sus respuestas, y ellos se volvieron a mirarla.
Aditya recibió una llamada de alguien y salió de la cantina de nuevo.
—¡Aditya, espera! —dijo Elliana detrás de él, y él hizo una pausa antes de voltearse, con la mirada sesgada hacia ella mientras prestaba atención a la llamada.
Elliana miró a sus conocidos ojos cafés que lucían curiosos pero serios. Tenía el cabello peinado hacia atrás. No vestía nada extraordinario. Solo unos vaqueros sueltos y una camiseta debajo de una chaqueta. Parecía un adolescente de lo más normal, solo un poco más guapo de seguro.
—Sí, necesito que revises esos archivos. Lo haré. No te preocupes —dijo Aditya.