—Todavía, afuera.
El Dr. Mike soltó una carcajada y luego salió. La posesividad de este chico era ciertamente algo. Aunque, en realidad solo estaba bromeando con Dylan porque no era necesario que un médico esperara a su paciente las 24 horas del día.
Tenían muchas otras cosas que hacer.
Con Dylan quedándose junto a Anna, si había algo que cambiara, definitivamente le diría que la revisara primero.
Bueno, él simplemente esperaría en la sala de estar.
—Maullido. —Kitty rozó suavemente el hombro de Anna. Temía lastimar a Anna, pero esperaba que ella pudiera despertarse lo más rápido posible. Quería jugar con Anna otra vez.
—Estará bien, Kitty —dijo Dylan, sin saber si se lo decía a sí mismo o a Kitty.
—Maullido.
El hombre y el gato se sentaron en silencio, esperando.
…
Anna sintió que le dolía la cabeza.
La información que entraba en su mente en ese momento era abrumadora y sentía que estaba soñando.
Soñando con leer mucha información y también con ver el documental.