Recomendación musical: Forever alone- Jurrivh
—Sin llevar una vela encendida —Anastasia caminaba a través de los corredores, siguiendo a Dante a tres pasos de distancia en silencio. Ella miraba su amplia espalda, notando que él no había llevado un abrigo para protegerse del frío de la noche
Una vez que llegaron a una habitación que le pareció familiar y caminaron hacia el balcón, se dio cuenta de que había venido aquí la primera vez que hablaron. Era el balcón del jardín, con flores rojo-rosadas y enredaderas que se enrollaban alrededor de las columnas y la barandilla. El lugar lucía tan hermoso como cuando lo vio por primera vez.
Dante caminó hacia la barandilla del balcón, con pasos largos y lánguidos, antes de detenerse frente a ella, y Anastasia, aún cautelosa debido a su estado de ánimo, lo vio mirarla por encima del hombro y decir,
—Puedes acercarte. No muerdo.
Pero él podría morder si quisiera, Anastasia se dijo a sí misma, porque él ya lo había hecho antes.