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La copia perfecta de Tang Li Xue se aclaró la garganta y sonrió amablemente a Ye Zhen, mientras tiraba nerviosamente de su capucha negra un poco y se aseguraba de que sus orejas de zorro plateado todavía estuviesen cubiertas por ella.
La copia perfecta de Tang Li Xue hizo un saludo con la palma y el puño al guapo discípulo y lo saludó con un tono cortés:
—Xiao Xue saluda al joven héroe de la Secta de la Espada Inmortal. Xiao Xue cree que hay un malentendido entre nosotros.
Por supuesto, la copia perfecta de Tang Li Xue no fue lo suficientemente tonta como para mencionar su verdadero nombre completo aquí...
El saludo de Tang Li Xue sacó a Ye Zhen de su ensimismamiento, y casi dejó caer la lanza plateada que sostenía.
La dulce voz y la amable sonrisa de Tang Li Xue hicieron que Ye Zhen la adorara aún más.
Ye Zhen abrió su boca varias veces e intentó saludar a Tang Li Xue también, pero no salió voz alguna de su garganta.
