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—¿Qué debo hacer, Ah Yu? —preguntó Shan Yu.
El Doctor Viajero Liu miró a su discípulo antes de asentir. —¡Exacto, ve a buscar un carruaje! ¡No puedo caminar muy rápido! Tenemos que darnos prisa antes de que algo le ocurra a ella.
—...Maestro, solo di que quieres ser tú quien la rescate —comentó Shan Yu.
Aunque la Familia Lin está en la dirección opuesta de la dirección que tomaron ahora mismo.
—¿A qué estás esperando? ¡Ve a buscar el carruaje! —ordenó el doctor.
—Sí, sí —respondió Shan Yu.
El Doctor Viajero Liu resopló al ver que Shan Yu no actuaba directamente. Al mismo tiempo, no podía evitar sentirse un poco preocupado. A pesar de que Nan Hua tenía una gran habilidad, todavía era una niña que apenas tenía 10 años.
¿Estaría bien si hubiera gente maliciosa a su alrededor?
De verdad no debería haberla dejado al cuidado de Chen Yuan. Aquel noveno discípulo suyo no era de fiar.