Lewis inmediatamente la siguió y vio una cara familiar.
La persona que llevaba una bata blanca y gafas de montura dorada miraba a Keira con asombro.
Lewis había visto a ese hombre durante su estancia en Oceanion.
Una vez, Keira había sido llevada a la comisaría por algunos malentendidos y fue llevada al hospital en un estado de anemia.
En el hospital, fue este hombre, Matthew, quien la trató.
Matthew dijo que sufría de anemia por deficiencia de hierro, la cual podría llevar a choques peligrosos si se desmayaba por ella.
Pero, ¿no era él un doctor en Oceanion? ¿Por qué estaba aquí?
Y además, ¿por qué había venido Keira a este lugar?
En ese momento, había un paciente en la habitación, y fruncía el ceño mirando fijamente a Keira. —¿Quién eres? ¿Qué haces? ¡Necesitas esperar en la fila para ver a un doctor! —exclamó.
Keira ni siquiera se molestó en explicar, y Matthew dijo:
—Lo siento, necesito discutir algunos asuntos privados con esta joven…