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Los reporteros invadieron la residencia Sur, haciendo que la noticia sobre cómo Ellis y los miembros de la familia Davis estaban acorralados allí se volviera viral rápidamente.
En el hospital.
Austin estaba sentado cómodamente en el sofá con las piernas cruzadas, mientras Jackson aún estaba en la cama recuperándose. De repente, Austin se levantó de un salto, señalando emocionado su teléfono.
—¿Arreglaste a esos reporteros?
Jackson se quedó perplejo. —No.
¿Por qué haría eso?
Su objetivo era la venganza y destruir a la familia Olsen. El incidente en sí mismo era suficiente, y las acciones de la familia Olsen estaban cayendo. ¿Por qué gastaría dinero en arreglar a los reporteros?
Austin estaba confundido. —Si no fuiste tú, entonces, ¿quién hizo esto?
Pocos sabían que María estaba quedándose en la residencia Sur. Ni siquiera Austin sabía que ella no vivía con los Olsens.
Después de todo, María y Ellis eran recién casados. ¿Quién hubiera pensado que se mudaría?