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En cuanto Ellis habló, Keira inmediatamente entrecerró los ojos.
—¿Era el Tío Olsen verdaderamente su padre? Lo había sospechado desde el principio, pero no fue hasta que Jodie South dijo que no quería volver a ver al Tío Olsen que Keira lo confirmó.
Después de que Ellis terminó de hablar, ladeó ligeramente la barbilla hacia arriba, sintiéndose seguro de que habría impactado a todos.
Miró a Keera, esperando verla abrumada de alegría —después de todo, ¡un padre poderoso había aparecido de la nada! Pero lo que vio fue a la mujer de pie allí indiferente, mirándolo sin ninguna expresión.
Ellis estaba perplejo.
