```
Por la tarde, en la casa de la Familia Baldwin.
El extremismo de Amelia reveló una verdad al Viejo Maestro Baldwin, que era su intolerancia absoluta hacia la existencia de Mónica.
¿Pero en quién más podría confiar para heredar la familia Baldwin?
Cuando Amelia despertó después de desmayarse, vio al Viejo Maestro sentado al lado de su cama. Se esforzó por sentarse y le dijo:
—Abuelo... tuve un sueño sobre mi madre otra vez.
—Ah... —El Viejo Maestro suspiró, su voz considerablemente envejecida por este incidente.
—Abuelo, solo puedo tolerar a una entre la madre y su hija, Mónica. Absolutamente no puedo soportar que ambas se queden en la Familia Baldwin, pisoteando el espíritu de mi madre en el cielo.
—¿Qué quieres hacer?
