—Mónica... ¿nunca ha actuado Mónica Baldwin antes? —alguien preguntó—. Imposible... este nivel de habilidad, es imposible...
—¿Es porque no teníamos expectativas de ella? ¿Por eso nos pareció deslumbrante de manera inesperada?
Después de unas cuantas discusiones calladas, la habitación de ensayos volvió a quedarse en silencio...
De vez en cuando, una tos surgía de la multitud, tratando aparentemente de romper la incomodidad. Luego, el director Harold se levantó y fue el primero en aplaudir, y los demás no pudieron evitar expresar sus opiniones, animándola con sonidos de aplausos.
—¿De verdad nunca has actuado antes? —incluso el subdirector que había despreciado a Mónica preguntó, mirándola con los ojos muy abiertos.
—No...