Chereads / Odyssey Of The Fallen Angel / Chapter 41 - 41:Entrenamiento del Incubus 2

Chapter 41 - 41:Entrenamiento del Incubus 2

Luego de lo que fue una larga y sombría fiesta de té, termine convenciendo a las chicas para volver a bajar a Whitered Abyss para mediar o aunque sea intentar detener lo que pensaba que estaba a punto de suceder.

Pero... En el momento en el que llegamos a la segunda muralla, eso sucedió...

""....""

Todos estábamos anonadados y manteniendo un silencio sepulcral por la impactante vista que estábamos presenciando ahora.

La tercera muralla estaba en llamas.

Y no solo eso...

4 pilares de llamas con característicos tonos rosados estaban emergiendo en diferentes zonas de la tercera muralla y se alzaban magníficamente hacia el techo de roca de este espacio deformado llamado Whitered Abyss...

"(Me la esperaba de alguna manera... Pero, Regina... ¿No crees que exageraste demasiado?)"  Con ese pensamiento, sonreí dolorosamente mientras veía esos pilares de llamas

mi mente no estaba en sus mejores condiciones para lidiar con esto y sinceramente, luego de pensar en todo lo que los tipos en esa muralla querían hacerme... Todo sentimiento de querer ayudarlos se desvanecía instantáneamente...

Pero lamentablemente, al ser un ángel del Departamento de juicios de lo sobrenatural, estaba obligado a intervenir en ese infierno...

Estaba obligado... A menos que tuviera un motivo para no hacerlo...

Con esa resolución, termine mirando el grupo que vinieron conmigo.

Justine, Muriel, Aliyah, Jeanne, Anna, Sienna... Y la santa inquisidora recién incorporada, Krista.

Al igual que Ann, Krista es una Santa Inquisidora de alto rango encargada de proteger a Jeanne en todo momento posible. Una joven belleza humana de  25 años, altura de 170 cm, largó cabello azul marino que llegaba hasta su cintura, finos ojos azul profundo, una envidiable figura esbelta con proporciones perfectas, ni muy grandes ni muy pequeñas, pero que esta generalmente oculta por su hábito de monja.

Si alguien viera a Krista por primera vez, con su piel cuidada y su semblante radiante no pensarían en ella como una joven monja que rezaba constantemente en un monasterio, sino que en una joven señorita con buena educación y de una gran familia. Y no estarían muy equivocados verdaderamente ya que Krista proviene de una prestigiosa familia de Santos Inquisidores de larga data.

A veces cuando veía a Ann y Krista juntas no podía evitar pensar en como se llevaban tan bien cuando son tan diferentes.

Por un lado estaba Ann que es dedicada, un poco recatada, directa, pero amable y que se llevaba generalmente bien conmigo hasta el punto en que conversa conmigo cada vez que podía. Y por el otro lado, Krista, que es despreocupada, animada en su mayoría y un poquito mal hablada, y que me odiaba hasta el punto en el que hacía todo lo posible para alejarse de mí cada vez que estaba cerca.

Sacudí mi cabeza para dejar de perder tiempo en trivialidades y volvi a mis intenciones iniciales.

"(Con este grupo aterrador no hay manera que suceda algo grave, por lo que no necesitaré preocuparme por eso...)" asentí para mí mismo y procedí a hacer mi movida rápidamente.

"Sigh... Realmente esperaba no tener que lidiar con eso, pero como ya estamos aquí no haya otra opción. Sigh..." Justine sostuvo fuertemente su frente por el dolor de cabeza provocando por la maniaca con la que no quería lidiar.

"Llegado a este punto, entonces solo queda recurrir al tipo que puede controlarla-..." Cuando Justine estuvo apunto de comandar las órdenes sobre como lidiar con la chica maniaca de la tercera muralla, termino impactada sobre mi extraños movimientos. "¿Eh?, Acedia, ¿Que estás-?"

Lamentablemente yo ya había tomado todos los preparativos y simplemente actúe lo más rápido posible para escapar de ahí... Claro que hubo un factor importante que facilitó mí escapé de está situación...

"¿Eh?" Ann que estaba concentrada en la escena de la tercera muralla no pudo evitar confundirse al sentir como sus piernas abandonaron la tierra.

"Lo siento mucho pero surgió un asunto que debo resolver primero... Perdóname Jeanne, tomaré a Ann prestada por un tiempo, bye."

Con ésa burda disculpa sin ningún peso de culpa, tomé a Anna en mis brazos en una posición de princesa y caminé lo más normal y rápidamente posible para huir de ahí. Y aunque improbable en este punto, en casó de que alguna intentará seguirme...

"" . Con esa magia, mi cuerpo que sostenía a una nerviosa caballero se empezó a descomponer en una niebla que desapareció en los callejones sin ningún rastro detrás.

"...."  Ningúna de las chicas pudo decir algo o siquiera seguir el ritmo de ese suceso.

... Extraño.

La situación fue tan extraña que ninguna pudo seguir los pasos de Acedia a tiempo por mucho que lo intentarán.

////////////////////// ///////////////////////////// ///////////////////////

[POV Damian]

"Ha... Ha... Ha... ¡Maldición"

¿Cuánto tiempo paso desde que empecé a repetir esas palabras constantemente?.

"Grrrrww"

¿Minutos, horas, días?...  No lo recordaba bien sinceramente...

"Ha... Ha... ¡¿Otro más?!..."

Simplemente repetí las mismas acciones que me mantuvieron con vida hasta ahora...

"¡¡Graw!!"

"¡¡…!!, ¡¡Toma!!"

Tome un arma... Y atravesé a mi enemigo.

Derramando la sangre de mis enemigos nuevamente...

....

....

....

"Haa... Haa.... Haaa...." Respire pesadamente mientras veía el charco de sangre recién creado en el ceniciento césped frente a mí junto con los pequeños fragmentos de una espada oxidada.

Mientras más veía está escena, no pude evitar pensar en estos últimos momentos de mí vida y en las cosas que termine aprendiendo desde que caí en este lugar.

Lo más fácil de aprender fueron en las fragilidad de estas bestias cuadrupedas conformadas por lo que parecía ser sangre... No hacia falta más que un solo golpe en el lugar correcto para que el cuerpo de estas bestias se desintegrará y se transformarán nuevamente en su forma original de un charco de sangre.

Curiosamente, con la muerte del primero de estas bestias fue que aprendí la segunda información más importante de esta zona: Las armas esparcidas por doquier tenían la durabilidad de impactar o aguantar un solo ataque.

Cuando aprendí esta mierda por primera vez, termine llorando..... Realmente fue un mal momento aprender eso cuando estaba rodeado de 5 de esas malditas bestias.

Y por último... La cosa más importante y significativa que entendí en este lugar, fue algo horrible de mí mismo...

No siento nada al matar...

Absolutamente nada...

...

Al principio no pude seguir el ritmo de la situación y salí corriendo despavorido hacia donde veía...

Fue un acto cobarde e innegablemente humano de mí...

No quería matar a esas cosas por muy monstruosas que se veían, pero tampoco quería ser asesinado sin piedad por ellos... Por eso, sin darme cuenta, ya estaba corriendo para escapar de esas bestias de sangre.

Corrí desesperadamente sin ninguna vergüenza para poder sobrevivir...

Corrí sin rumbo hasta el cansancio, solo esperando caer rendido en un lugar seguro...

Sin embargo... Tal esperanza era inútil.

En un simple segundo de descuido para tomar aire, fuí asaltado por una de las bestias sangrientas cayendo al suelo con ese monstruo encima mío.

Cómo un humano siendo atacado por un lobo... Fuí rasgado por sus garras... Fuí mordido por sus colmillos... Y finalmente fui presa del miedo.

En ese momento lleno de miedo, inconscientemente, con tal de mantenerme con vida, usé uno de mis brazos como escudo contra ese monstruo y con la otra empecé a buscar algo con que defenderme.

¡¡Smash!!

Y finalmente, luego de ese sonido mi cuerpo terminó bañado con una espesa y cálida sangre...

...

Cuando finalmente abrí los ojos y volví a ver el charco de sangre, fui asaltado por un fuerte cansancio por recordar ese momento aterrador.

Fue verdaderamente una suerte que en esa situación alcanzará un cuchillo con el que apuñale a la bestia de sangre en su cuello... Incluso si mi brazo izquierdo fue brutalmente despellejado y agujereado hasta el punto de ser inutilizable, lo que siguió de ese momento fue un sorpresivo sentimiento de paz y serenidad...

"Sigh... aún así realmente no quiero volver a repetir ese tipo de situacion... Menos aún cuando al momento siguiente sus amigos terminaron llegando al siguiente segundo". Suspiré cansadamente sabiendo que tal esperanza era difícil de lograr.

Aúnque ahora ya estoy más tranquilo ante los ataques de esas bestias y logré incluso atravesar 2 de esas puertas gigantes, sabía bien que el mínimo descuido era fatal en este lugar.

Me falta técnica, instintos de batalla e incluso una buena estrategia... Es un milagro que haya logrado avanzar tanto simplemente agitando las armas que tomaba mientras esperaba lo mejor.

"(Aúnque... Cuando peleó contra una de esas bestias, algunas veces termino sintiendo un poco de incomodidad cuando hago algunos movimientos extraños... ¿Supongo que eso podría ser llamado como mi instinto demoníaco haciendo presencia?... Cómo para decirme que debo corregir para ser más fuerte...)"

"Sigh..." Mientras me perdía en esos pensamientos termine al final tumbando mi cuerpo al piso mientras suspiraba pesimistamente y recordaba las batallas del pasado.

"(Sienna y Acedia lo hicieron ver mucho más fácil de lo que es en realidad.....)"

Mientras más tiempo pasaba en este lugar no pude evitar sentirme más impresionado cada vez que recordaba los anteriores sucesos.

Sienna tenía una gran variedad de técnicas que usó en la batalla del campus con los que lidio fácilmente con esos demonios que me buscaban. No podía imaginar cuánto tiempo estuvo aprendiendo para poder luchar tan confiadamente... Y Acedia...

"Sigh... No dudo de que ese tipo con sueño perpetuo podría atravesar la maldita 5ta pared de esté lugar en simples minutos... Maldición". Inconscientemente una sensación de envidia termino apareciendo en la última palabra.

Y con sentimientos amargos como inspiración... El Incubo volvió a sostener un arma nuevamente.... Aunque...

Drip Drip Drip Drip Drip Drip Drip Drip Drip Drip

"¿…?, ¿Llueve?... ¿Eh?, Pero ésto no es agua, es... Mierda-"

El mundo siempre parecía ir en su contra en estos días.

////////////////////// ///////////////////////////// ///////////////////////

[POV Acedia]

Luego de huir de ese problema de la tercera muralla, termine llevando a Ann conmigo a una arquitectura similar al de una iglesia antigua abandonada.

No había una manera mejor de describir este edificio que esa... Los vitrales en las paredes estaban rotas en algunas partes, las paredes parecían mostrar años de humedad y para rematar, había un inmenso agujero en el lado derecho del techo.

Me sorprendió que este edificio aún no se hubiera demolido por si mismo con ese estado.

En todo casó, aún tenía otros problemas con los que lidiar ahora...

"Ugh... La próxima vez que hagas eso, avísame... Ugh, siento mis entrañas revueltas." Una Santa Inquisidora rubia se estaba recostando en el muro del edificio mientras sostenía su estómago con dolor.

"Perdon..." Me disculpé sinceramente ya que no podía culparla sobre como se sentía ahora.

⟨Walking Among Dreams⟩ era una magia del repertorio de Pereza que me permitía ocultar mi presencia de diferentes barreras o magias de rastreó. En esencia convertía mi cuerpo en una especie de niebla para ingresar a todas partes discretamente.

Pero ese tipo de transformación de un cuerpo físico a un cuerpo espiritual no era muy agradable de sentir la primera vez... Dando así la situación de Ann.

"Ahm... Intenta pensar en esto como una inspiración cuando alcances el estado de iluminación"

"Ugh... Siento que volví a comer la comida 'llena de amor' de Jeanne... "

"... (Por el bien de ambos, haré como que no escuché eso)"

Mantuve esa resolución con mí silencio mientras le daba a Ann unas palmadas en la espalda hasta que se sintiera bien.

Instintivamente no pensé en que demonios era esa parte de: 'lleno de amor' que Ann mencionó...

"Sigh... Entonces para que vinimos a está especie de, ¿Capilla?... No serías tan audaz como para pedirme matrimonio ¿Verdad?"

"¿Eh?..... No, no... ¿Cómo diablos llegaste a esa conclusión?"

"... Es que contigo a veces no se ni que esperar... "

"... No sé cómo sentirme con lo que dijiste... No negare que Muriel me está incitando a seducirte, pero... Sigh... Olvídalo, creo que entenderás cuando entremos..."

"Veo-... ¡¿Qu-?!"

Luego de ese absurdo dueto de comedia nuestro que terminó mal para la santa inquisidora, terminé ingresando a la capilla, para terminar siendo sorprendido por el interior de esta.

"¿Cómo-?" Ann cuando volvió a sus sentidos y entro detrás mío, no pudo evitar expresar su sorpresa y confusión por la escena producida dentro de la capilla.

Si de por sí la barrera que sentimos al ingresar a la capilla fue rara, el interior fue mucho peor.

Al parecer la capilla era rodeada por una barrera con el propósito de ocultar las energías emitidas del interior y así mantenerse oculta pareciendo un edificio cualquiera de la ciudad... Cómo si fuera una especie de refugio.

Pero el Interior era demasiado caótico...

"Aquí sucedió una batalla recientemente... Pero... Ésto debería ser imposible" Ann no dudo en ingresar y dar su opinión sobre el interior.

Rasgaduras de cortes esparcidas en las paredes, múltiples muebles de madera destruidos en pedazos como si algo los hubiera aplastado... Incluso sangre y cuerpos de demonios con 6 alas desmembrados por doquier.

Pero a lo que Ann más le había sorprendido de esta escena fueron las extrañas estructuras de energía dorada erigidas en todo el edificio y que se supone que no deberían existir aquí en primer lugar...

"Se supone que ningún Santo Inquisidor tiene jurisdicción en Whitered Abyss... ¿Pero ésto?... Esto parece haber sido hecho desde hace días..." Mientras Ann seguía tocando cuidadosamente esos pilares de luz, sin seguir entendiendo el propósito de esto, termino mirando a Acedia más confundida que desde el principio. "¿Cuál es el propósito de mostrarme todo esto?"

"... Sobre eso-"

Tring

Cuando estaba a punto de explicar, la puerta de la capilla fue abierta abruptamente...